Al incorporar un perro o un gato a la casa, el cuidado de su salud se convierte en un tema primordial. "La crianza de una mascota requiere una tenencia responsable. Uno de los cuidados más importantes es la prevención de las enfermedades", explica el doctor Miguel Durán, de la Fundación Argentina para el Bienestar Animal.
El cumplimiento del plan sanitario es fundamental para
evitar las patologías que los afectan con mayor frecuencia. En el caso de los perros, se realiza una desparasitacion al mes y medio de vida y se repite a los 10 días. A esto se suma el cronograma de vacunación, que comienza al segundo mes y, entre aplicaciones y refuerzos dura tres meses.
Los gatos se desparasitan a los 40 días y son vacunados a partir de los 75.
Una vez que termina el plan el sistema inmunológico del animal está desarrollado. De todas formas, perros y gatos pueden estar expuestos a otras enfermedades.
Las diferencias
En el caso de los perros, lo mejor es consultar al veterinario o en el criadero qué cuidados demanda el animal que se adquiere. Es que, según el tipo de raza, pueden ser propensos a sufrir determinadas patologías.
En los perros grandes, como el ovejero alemán, es muy común la displacía de cadera. En cambio, razas enanas, como salchicha y basset hound, pueden sufrir con mayor frecuencia otros problemas de cadera. Por ejemplo, hernias de disco.
Los especialistas aconsejan tomar estas indicaciones como guía para evitar o controlas el desarrollo de estas patologías. Así, por ejemplo, en la crianza de las razas gigantes -como el gran danés- se podrá prevenir una torsión de estómago dividiendo la alimentación en varias raciones diarias. Es que esta patología se produce, generalmente, cuando comen muy rápido y en exceso, toman mucha agua o realizan una actividad física demasiado exigente luego de alimentarse.
El cuidado de un gato también tiene sus secretos. "Muchas veces, se cae en el error de pensar que el gato es como un perro chico. Pero se trata de dos especies diferentes, que sufren distintas enfermedades y requieren diversos tratamientos", explica el doctor Jorge Guerrero. Y agrega: "la dosificación de un mismos medicamento varia si se aplica a un perro o a un gato".
La toxoplasmosis es una de las enfermedades más peligrosas en estos animales. "El gato es el único felino que tiene un doble circuito reproductivo de este parásito, que es uno de los peligrosos dentro de lo que pueden ser transmitidos al hombre", explica el doctor Miguel Durán. Esta enfermedad, que se transmite por el contacto con la materia fecal, es de gran peligrosidad en embarazadas.
El cumplimiento del plan sanitario es fundamental para
evitar las patologías que los afectan con mayor frecuencia. En el caso de los perros, se realiza una desparasitacion al mes y medio de vida y se repite a los 10 días. A esto se suma el cronograma de vacunación, que comienza al segundo mes y, entre aplicaciones y refuerzos dura tres meses.Los gatos se desparasitan a los 40 días y son vacunados a partir de los 75.
Una vez que termina el plan el sistema inmunológico del animal está desarrollado. De todas formas, perros y gatos pueden estar expuestos a otras enfermedades.
Las diferencias
En el caso de los perros, lo mejor es consultar al veterinario o en el criadero qué cuidados demanda el animal que se adquiere. Es que, según el tipo de raza, pueden ser propensos a sufrir determinadas patologías.
En los perros grandes, como el ovejero alemán, es muy común la displacía de cadera. En cambio, razas enanas, como salchicha y basset hound, pueden sufrir con mayor frecuencia otros problemas de cadera. Por ejemplo, hernias de disco.
Los especialistas aconsejan tomar estas indicaciones como guía para evitar o controlas el desarrollo de estas patologías. Así, por ejemplo, en la crianza de las razas gigantes -como el gran danés- se podrá prevenir una torsión de estómago dividiendo la alimentación en varias raciones diarias. Es que esta patología se produce, generalmente, cuando comen muy rápido y en exceso, toman mucha agua o realizan una actividad física demasiado exigente luego de alimentarse.
El cuidado de un gato también tiene sus secretos. "Muchas veces, se cae en el error de pensar que el gato es como un perro chico. Pero se trata de dos especies diferentes, que sufren distintas enfermedades y requieren diversos tratamientos", explica el doctor Jorge Guerrero. Y agrega: "la dosificación de un mismos medicamento varia si se aplica a un perro o a un gato".
La toxoplasmosis es una de las enfermedades más peligrosas en estos animales. "El gato es el único felino que tiene un doble circuito reproductivo de este parásito, que es uno de los peligrosos dentro de lo que pueden ser transmitidos al hombre", explica el doctor Miguel Durán. Esta enfermedad, que se transmite por el contacto con la materia fecal, es de gran peligrosidad en embarazadas.
Otros cuidados especiales
La salud de las mascotas requiere de algunos cuidados especiales. A continuación, algunas pautas básicas.
1. Primeros auxilios.
Ante una situación de emergencia, y hasta contar con una atención veterinaria, hay algunas acciones que puede tomar el dueño.
Según un informe de recomendaciones del Pet Food Institute, ante heridas superficiales, hay que limpiar con antiséptico y asegurarse que no se desarrollo una infección.
Si se trata de una quemadura provocada por el contacto directo con una fuente de calor, lo mejor es aliviar el dolor colocando una pomada para quemaduras.
En cambio, de estar causada por un líquido abrasivo, conviene enjuagarla primero con jugo de limón.
Asimismo, en caso de fracturas o envenenamientos, se recomienda acudir con urgencia a un veterinario.
2. Precaución
Si un animal tiene hongos o enfermedades en al piel, se recomienda evitar el contacto directo, y que pueden ser transmitidos al hombre.
3. Contra el frío
Si las mascotas permanecen en lugares fríos en forma prolongada, se puede quebrar sus mecanismos de regulación térmica. En época invernal es muy común que sufran afecciones respiratorias. Una buena medida es reforzar su alimentación, a fin de que respete sus necesidades de calorías y nutrientes. Otros consejos: controlar la vigencia de las vacunas, secarlos bien luego de los baños y hacer los paseos a la tarde.
4. Sin sobresaltos.
En caso de cambiar de dieta o de alimentos balanceados, se recomienda hacer la transición paulatinamente para evitar desordenes nutricionales.
5. Buena vista.
Los ojos pueden sufrir afecciones comunes, como conjuntivitis o más graves, como cataratas. Lo mejor es evitar que jabones o champúes entre en contacto con los ojos. Además, en caso d estar irritados, limpiarlos con agua tibia o realizarle lavados oculares.
6. Los dientes.
También se recomienda limpiar y hacer revisar periódicamente la boca del animal, a fin de evitar el desarrollo de sarro y otras enfermedades.
Fuente: Diario Clarín - Mascotas & Cía - 26.04.03
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