Como Perros Y Gatos II

Si los perros son guardianes, cuidadores y protectores de la casa, los gatos son casi todo lo contrario. Perezosos, rebeldes e independientes, los mininos parecieran no dudar de su condición de "animales míticos".

Su domesticación ocurrió más tarde que la de los perros, ovejas, pollos o patos, otras especies que el hombre adoptó en la antigüedad como animales capaces de vivir con él en una misma propiedad.

Peter Neville, investigador del Centro de Etología de Mascotas, de Inglaterra, explica que los gatos tuvieron su primera relación armoniosa con el hombre del Antiguo Egipto. El antecesor es el gato salvaje africano. La costumbre de tenerlos como animal de compañía fue llevada por esos egipcios a todo el mundo a través de las rutas comerciales de navegación.

Uno de los sellos distintivos de esas mascotas: ser mimoso. A veces, el cariño excesivo confunde a los mininos. Eso ocurre porque el gato no está capacitado para responder de forma socialmente cooperativa a la expectativa de afecto u otras recompensas ofrecidas por sus dueños, sólo puede cumplir el rol de compañero infantil y dependiente.

Cuando la mascota no responde como sus dueños quieren se suele pensar en un problema a resolver. Sólo hay que entender que los gatos viven como si estuvieran de paso por nuestras vidas. No son capaces de aceptar las órdenes de su dueño y que están destinados a compartir todo con él. Por naturaleza, son independientes y conservan intactos sus instintos salvajes. Muchos viven como animales de compañía; otros siguen disfrutando de la más amplia libertad en estado libre, tal como la hacía el primer gato salvaje africano que pasó alguna vez por el Antiguo Egipto.

En el libro "El gato doméstico: biología de su conducta", de D Turner y P. Bateson, se aclara que pueden utilizar señales olfativas, visuales y táctiles, además de sonidos característicos.

El rascar el suelo con sus patas traseras después de miccionar. Sépalo: lo hace para dejar rastro a través de las glándulas que tienen en las almohadillas de sus patitas.

Cuando lo vea con la boca abierta, como intentado "morder" el aire, es porque hay otro gato cerca y está intentando llamar su atención. Eso ocurre porque, el gato no mira directamente para buscar que lo miren.

¿Qué pasa entre perros y gatos? No son enemigos naturales pero tampoco amigos naturales. El doctor Gerzovich Lis sostiene: "Si un perro se cría con un gato desde cachorro, pueden llegar a tener una buena relación. Sino, el perro considera al gato como una presa más que como rival; y que el gato lo vea como un predador"

El lenguaje de mi lindo gatito

Marcas de identificación

El gato se frota la parte lateral de la cabeza, desde el mentón, pasando por la comisura labial y terminando delante de la oreja.
Estas marcas faciales de feromonas se depositan sobre objetos o personas desconocidas, de esa manera desactiva posibles conflictos territoriales.

Aceptación

Frotarse contra la pierna de su dueño o de otra persona que llega a la casa.
Esta es un clara señal de amistad por parte del gato hacia el hombre.

Sumisión

a - Agachado, cabeza baja con orejas contra la cabeza.
b - Cola baja y no emite sonidos.
Esta señal es de sumisión y es realizada cuando no es posible la huida.

Relajado y feliz

a - Echado y con los ojos cerrados.
b - La boca asemeja a una sonrisa.
Claros indicios de que el gato se encuentra relajado y tranquilo.

Signos de placer

Presionar con las patas la falda de su dueño, el suelo o algún objeto como si estuviera amasando.
Es una expresión de placer. Se asocia con recuerdos del período de lactancia, cuando presionaba la tetilla de la madre durante el amamantamiento.

Invitación al juego

a - Erguido
b - La cola vertical en "U" ó "U" invertida
c- En el juego social generalmente utiliza las garras de las patas delanteras para atraer a su oponente.

Es una forma de invitación al juego aunque también indica que el gato se encuentra con buena predisposición a ser sociable.

Rasguñar un árbol

a - Golpeteos con las garras traseras.
b - El gato agarra el tronco del árbol con las patas delanteras extendidas y el cuerpo agachado.

Estas señales indican que está eliminando las fundas viejas de las garras (afilando las uñas) y dejando un rastro visual y olfativo a través de las glándulas de las almohadillas de las patas.

Amenaza de ataque

a - Agazapado
b - Cola en movimientos suaves
c - Patas delanteras juntas

Es una señal de que el gato está preparado para dar el salto sobre su presa.

Amenaza defensiva

a - Cola hacia abajo
b - No emite sonido
El animal se encuentra amenazado y está dispuesto a atacar si es necesario.

Defensa extrema

a - Acostado boca arriba
b - Cola con movimientos
c - Emite bufidos
Esta señal agresiva y temerosa corresponde a un gato que se siente amenazado y sin salida.

Nocturnos y perezosos, los gatos tienen una gran variedad de sonidos

Los gatos jamás permitirían a un ser humano considerarse su dueño. Quien quiera convivir con ellos deberá pactar un común acuerdo. Si no, estarán dispuestos a abandonar el hogar buscando un sitio sin imposiciones. Tal vez por eso los gatos se sienten más a gusto con las mujeres que con los hombres, ya que estos tienen un afán de dominación y sometimiento que poco coincide con las características felinas. A esto se le suma su predilección por los sonidos agudos, que generalmente encuentran en la voz de mujeres y niños. Para comunicarse entres sí y con sus dueños, los gatos tienen recursos corporales pero también algunas señales que emiten a través de los sonidos de variada intensidad:

a - Contacto: dos o más ronroneos con al boca cerrada.
b - Saludo: maullido estándar (miau) con la boca entreabierta.
c - Agresión: gruñido, aullido, rugido con la boca abierta en posición fija.
d - Defensa: bufido o bufido corto con la boca abierta en posición fija.
e - Miedo o dolor: chillido ligeramente ascendente con la boca abierta en posición fija.
f - Contacto con sus crías: chirridos que parecen trinos en tono ascendente y con la boca cerrada.

Fuente: Revista Viva de Clarín